¿Conoces el concepto micromanagement? En Novva Comunicaciones te explicamos en qué consiste, por qué ocurre y qué hacer cuando se presenta.

El micromanagement se refiere a la gestión que se centra excesivamente en los detalles. Según HubSpot es asumir el control de una tarea, proyecto u operación de una manera muy particular y minuciosa. Microgestionar personas no es únicamente controlar su trabajo, sino también las decisiones que toman y su ejecución. Estas acciones están mal vistas en el espacio laboral, ya que pueden inhibir las iniciativas de una persona y su creatividad.

La Cumbre, plataforma de liderazgo, nos cuenta que el micromanagement se encuentra en el top 3 de las razones por las cuales los empleados renuncian. Al mismo tiempo el 79% de los trabajadores reportan haberla padecido en sus trabajos actuales o pasados.

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¿Cómo puedes identificar a un jefe con estas características? El micromanager es aquel que busca obtener buenos resultados con un mínimo de errores, centra toda su atención en controlar detalles sin importancia, ignorando lo verdaderamente relevante para la empresa. Un jefe microgestor tiene efectos negativos sobre su equipo de trabajo, como:

• Pierden la motivación ante la poca apreciación de su trabajo.

• Se sienten inseguros sobre sus capacidades y competencias.

• Sienten tensión emocional y baja autoestima.

Pero, ¿cómo podemos evitar esta práctica en nuestra área de trabajo? Hay varias maneras de hacerlo y en Novva te compartimos algunas recomendaciones:

• Delega: Concéntrate en las fortalezas de tu equipo y delega tareas. Explica exactamente lo que necesitas y cuál es su propósito. Recuerda que debes solicitar un reporte de avance de la tarea y/o proyecto.

• Sé claro: Indica de qué manera se debe presentar el trabajo, el tiempo de ejecución, lo que necesitas y establecer la fecha límite de entrega. Pregunta si se ha entendido la solicitud, si hay dudas o preguntas al respecto.

• Fomenta: Incentiva la creatividad en los proyectos y las ideas fuera de la caja.

• Escucha: Aprende a escuchar más a tu equipo para el desarrollo de estrategias, para resolución de conflictos y crisis. Motiva a tu equipo de trabajo a compartir sus opiniones.

• Confía: Crea una cultura empresarial de confianza y responsabilidad compartida.

• Reconoce: Sé consciente de la participación de tu equipo en los proyectos para darles el crédito correspondiente, reconocer el buen trabajo y recompensar a las personas (día libre, remuneración, promoción, actividad fuera de la oficina, etc.)

Ser un micromanager puede impactar la proactividad y la asertividad en los equipos de trabajo, generando efectos contraproducentes en la consecución de metas empresariales y el clima laboral en las áreas de una compañía. Ser buen líder requiere motivar a las personas, confiar en sus capacidades y que cada día superen sus límites para descubrir lo que son capaces de hacer.

Con estas recomendaciones, no se aplacará la productividad y se creará un clima laboral favorable.  Que tus pilares sean construir conocimiento en conjunto y asumir responsabilidades compartidas y sin darte cuenta, ¡habrás dejado de ser un micromanager para convertirte en un líder!

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